FISIOLOGÍA GLOBAL

En este bloque de artículos voy a intentar dar una idea global de lo esencial de los mecanismos fisiológicos para poder aplicar estos a la vida cotidiana. El entendimiento de dichos mecanismos se facilita mucho cuando conocemos la fisiología global basada en las influencias universales de los Cinco Elementos. Así que, partiré de este enfoque de la medicina china y actualizaré dicha visión con los conocimientos actuales de la fisiología para mostrar específicamente los mecanismos más significativos para la vida familiar, social, educativa, laboral o empresarial, e incluso para tenerlos en cuenta en la organización estatal.

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El orden de la vida

Al contrario del orden del mundo, el orden natural de la Vida es claro y lógico. Mediante sistemas simples, la inminente animación orgánica (mecanismos basados en leyes universales) consigue efectos renovadores, armonizadores y vitalizadores basados en una dinámica que produce por sí misma la capacidad de auto-abastecimiento, auto-organización, auto-regulación, autocorrección y auto-regeneración.

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¿Cómo se organiza el cuerpo?

Comparando el orden de la Vida con el orden establecido en el mundo, se hace evidente que debemos el estado conflictivo del mundo al hecho de que su organización está basada en los principios interesados y arbitrarios del ego. Y cuando prestamos atención a las consecuencias del poder del ego en la conducta del ser humano, es evidente que la inminente animación orgánica nos está mostrando de mil maneras que los principios interesados que determinan el funcionamiento del mundo no son solamente injustos, sino además inviables, ineficaces e insalubres.

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La función directiva (Riñón)

Viendo cómo está organizada la labor directiva y ejecutiva en el cuerpo, encontramos una abrumadora cantidad de razones que justifican la visión de la mayoría de la humanidad sobre cómo los gobiernos y, en general, los directivos deberían ejercer su labor.

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La función ejecutiva (Corazón)

Los Elementos Agua y Fuego mantienen una relación similar a la que mantienen lo Creativo y lo Receptivo. Son fuerzas vitales complementarias: “La lluvia obra el humedecimiento, el sol obra el calentamiento. Por eso, el Agua y el Fuego no se combaten entre sí,” dice I Ching. “Si el Agua nutre la Tierra y el Fuego se adhiere a lo consistente, obran templanza y luz duradera en el mundo y se crea vida en la Tierra. Y si el Agua nutre la naturaleza humana (Madera) y el Fuego se guía por amor, la obra de la humanidad en el mundo (Metal) se dirige hacia la luz, igual que las plantas crecen hacia la luz.”

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La función reguladora de comprometerse (Linfa)

Introducción

Como hemos visto al final del artículo anterior, los órganos que se encargan en el cuerpo de la Administración Pública (Corazón) y del Gobierno (Riñón), necesitan la linfa para ser capaces de nutrir el organismo y para renovarse mutuamente. La fisiología describe cómo la linfa regula el intercambio entre el plasma sanguíneo y los líquidos corporales, y enseña que se consiguen así tres objetivos inmediatos: la nutrición celular, el drenaje del medio interno y el mantenimiento de la liquidez de la sangre. Dicho mecanismo fisiológico es un claro ejemplo del principio vital de la complementariedad en la que la consecución de los propios intereses vitales sirve al bienestar común. Al estudiar las funciones de la linfa, se revela que sabemos y necesitamos ejercer dichas funciones por naturaleza y que el orden del mundo hace que intentemos impedírnoslo a la fuerza.

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La función del motor económico (Pulmón)

La fisiología enseña cómo continuar la obra de la naturaleza en el mundo humano. Observando las funciones de los órganos correspondientes a los Cinco Elementos, se revela que éstas corresponden a determinados órganos y tejidos en la sociedad. El Elemento Metal determina las condiciones vitales de la biosfera terrestre que posibilitan la existencia de vida orgánica y la supervivencia de los seres vivos. Siendo el órgano intermediario entre el organismo y el medioambiente, el Pulmón da el aliento de vida y sus demás aportaciones determinan la vitalidad del organismo.